ECONOMÍA

La integración económica

Integración económica, definción y tipos

Integración económica

La integración económica o uniones comerciales y regionales son acuerdos que suscriben países del mundo, muchos en el siglo XX que consisten en políticas comerciales para reducir o eliminar las barreras comerciales entre ellos, por ejemplo, la eliminación o reducción de los impuestos. Son acuerdos que varían en sus características y el grado de integración es muy variado.

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Tipos de integraciones económicas

La integración económica tiene diferentes niveles según la amplitud de la flexibilidad que existe entre los miembros y según eso se da lugar a diferentes tipos de integración económica. Según el grado de integración se clasifican de la siguiente manera:

  • Acuerdos comerciales preferenciales

Los acuerdos comerciales preferenciales consisten en otorgar barreras comerciales más bajas a las naciones que son parte de los acuerdos y más altas o más restrictivas a los países que no participan.

  • Las zonas de libre comercio

En dónde se retiran todas las barreras comerciales entre los países que la integran, pero cada país mantiene sus propias restricciones para los demás países que no forman parte.

  • Unión aduanera

Al igual que la zona de libre comercio, no permite que existan barreras comerciales entre sus integrantes, pero además trata de que todas las políticas comerciales sean iguales, por ejemplo, establecer tasas arancelarias comunes hacia el resto del mundo.

  • Mercado común

El mercado común es mucho más flexible que la unión aduanera porque permite el libre desenvolvimiento del capital y del trabajo entre sus miembros.

  • Unión económica

Es una integración económica mucho más avanzada e integral porque también implica la armonización entre las políticas monetarias y fiscales de los estados que la integran.

Las nuevas integraciones económicas y sus diferencias con las de primera generación

 Los bloques de integración comercial más recientes como el MERCOSUR y Alianza del Pacífico tienen como rasgos fundamentales que, en comparación con los de primera generación, cuentan con una simplificación de trámites administrativos, reduciendo los procedimientos y niveles burocráticos y sus sistemas económicos son más abiertos.

Esto aporta celeridad y eficiencia a los procedimientos de intercambio de bienes y servicios y corrige las fallas de los bloques más antiguos, y refuerza sus fortalezas pero por medio de integraciones nuevas.

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